El debate educativo es un modelo formal de argumentación entre dos equipos, donde uno defiende la postura a favor y el otro la postura en contra sobre un determinado tema. El debate empieza con la “resolución”, una simple frase que recoge el tema que va a ser objeto de un análisis crítico por parte de los dos equipos. El equipo que defiende la resolución, equipo a favor, empieza hablando primero y recibe el sobre nombre de equipo afirmativo. La oposición, o equipo negativo debe refutar los argumentos presentados por el equipo afirmativo y ofrecer argumentos en contra de la resolución adoptada. Se espera que cada uno de los equipos no solo describa sus posturas sino que también responda directamente a los argumentos presentados por sus oponentes. Es función del juez, una tercera parte neutral, escuchar con atención los argumentos presentados por ambos equipos y decidir quien ha utilizado los argumentos más persuasivos.
Además de ser una metodología educativa, los debates son conocidos como una parte intrínseca de las instituciones democráticas desde la época de la Grecia Antigua. El estudio y práctica del debate estimula el desarrollo de habilidades que son necesarias para vivir en una sociedad democrática. Por esta razón, el debate académico ha sido incluido en el sistema educativo de muchos países (Estados Unidos, Gran Bretaña y Australia) y miles de estudiantes de secundaria de todo el mundo participan en actividades de debate en las aulas y en programas extracurriculares.
Hay muchas modalidades de debate, que pueden variar ligeramente dependiendo del número de oradores participantes y las reglas y procedimientos. El debate es una herramienta de aprendizaje flexible que permite alcanzar varios objetivos educativos. El debate permite desarrollar las habilidades de comunicación y de expresión al proporcionar a los estudiantes la oportunidad de exponer presentaciones preparadas al igual que practicar exposiciones improvisadas cuando se responde a los argumentos presentados por otros estudiantes.
El debate ofrece una estructura y fija unos límites en el orden en que hablan cada uno de los participantes y el tiempo que cada uno de ellos emplea, introduciendo de este modo, un mecanismo de control al proceso.
Con la práctica del debate, los estudiantes desarrollan las habilidades de pensamiento crítico. Durante el proceso de preparación del debate, cuando los estudiantes necesitan determinar la posición del equipo en un determinado tema y durante el mismo momento del debate cuando los estudiantes tienen que responder de forma crítica a los argumentos presentados por el otro equipo, obligándoles a pensar en la base de sus argumentaciones.
El debate también enfatiza la investigación y el uso de evidencias escritas (ejemplos y cuotas) y requiere trabajo en equipo y cooperación entre estudiantes, durante el proceso de preparación y durante el debate. Además el debate es una excelente herramienta para resolver conflictos, pues enfatiza la comunicación tolerante, pacífica y respetuosa ante la opinión de otros.
El debate, como se ha venido mencionando, alcanza sus objetivos si se desarrolla a lo largo de varias sesiones que permitan cubrir varias fases:
El profesor desempeña el rol de facilitador en el debate. El profesor debe proporcionar un buen tema de debate que permita a los dos equipos tener argumentos de calidad. El profesor debe sugerir o proporcionar posibles recursos de búsqueda de información y ofrecer una guía durante la preparación del equipo. Finalmente, el profesor debe actuar como juez del debate y ofrecer feedback una vez el debate ha terminado.
El debate pude implicar tanto a un numero determinado de estudiantes (dependiendo del formato) o a toda la clase. Cuando sólo algunos estudiantes están directamente implicados en un debate, los otros estudiantes deben recibir la instrucción de cómo juzgar y evaluar un debate y como ofrecer feedback a los compañeros.
Aunque el debate se aplica mejor al final de una unidad, proporcionando el cierre y siendo un buen test para valorar los conocimientos adquiridos por los estudiantes, también puede utilizarse como introducción a una unidad, especialmente cuando el debate implica a todos los estudiantes y tiene por objetivo conocer lo que los estudiantes saben sobre un determinado tema, o durante cualquier otra fase del proceso educacional de una determinada unidad didáctica.